Ayer hablábamos del riesgo de elegir un nombre equivocado
para nuestros hijos, puesto que nunca sabemos lo que van a ser de mayor y la
relación que puede haber entre una cosa y otra.
Por el contrario, a veces se
acierta y hay nombres que resultan idóneos según para quien se apliquen.
Veamos
algunos ejemplos:
Para una florista... Hortensia
Para un floristo... Jacinto
Para un cazador furtivo... Silvestre
Para un actor... Oscar
Para una farmacéutica... Remedios
Para un viticultor... David
Para una curandera... Milagros
Para un sexador de pollos... Pío
Para un socorrista... Salvador
Para un estudioso... Leo
Para una mujer friolera... Rebeca
Para un juez... Justo
Para una persona madrugadora... Aurora
Para un militar... Marcial
Para un político... Tomás
Para una torera... Verónica
Para una gitana... Buenaventura
Para una cachazas... Serena
Para una prostituta... Consolación
Para una dependienta de pajarería... Paloma
Para un sicario... Mateo
Para una pianista... Tecla
Para una soltera... Soledad
Para un astrónomo... Saturnino
Para una condenada a muerte... Piedad
Para un cliente asiduo a los sex-shops... Demetrio
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